El 24 de junio se produjo la confirmación de Alejandro Gutiérrez Val como jockey en España al ganar con El Caney el Gran Premio de Madrid. Hasta hace poco su trayectoria profesional ha sido desconocida por muchos. En cambio, la historia de este jockey nacido en la localidad cántabra de Requejo comenzó a escribirse varios años antes. Sus primeros pasos en el mundo del turf los dio, como otros tantos jóvenes cántabros, de la mano de Enrique Puente en la playa de Laredo. Sin embargo, algo que comenzó como un pasatiempo en vacaciones pasó a convertirse en su futuro oficio. Su buen hacer hizo que debutase en Laredo el año 2014 con Ashdeuzo siendo sexto a unas semanas de cumplir los 16 años. Mientras que su debut en San Sebastián fue semanas después con Banbu en el Memorial Emilio Castiñeyra. En su segunda actuación fue quinto ante el asombro de muchos aficionados que veían a un chaval que tenía cara de niño y un cuerpo todavía sin desarrollar. Tras el verano, dio el gran paso de irse a
El caballazo que se perdió el Hipódromo de La Zarzuela… Este podría ser uno de los primeros titulares que rodea a PERSIAN RULER, un caballo que todo propietario quisiera en sus filas. Criado por Santiago Elorza este tordo era hijo de Don Roberto y Kalawelsh nacido el año 1995. Su hermano mayor era un tal KASHWAN (Unfuwain) que para la fecha del debut de nuestro protagonista ya había ganado los critériums de San Sebastián y Madrid. Salió a subasta y ante tanta incertidumbre posteriormente fue finalmente adquirido por el Marqués de Miraflores y Enrique Sarasola para correr con los colores de este primero. Y para el estreno PERSIAN RULER tuvo nada más y nada menos que una carrera de dos años en San Sebastián donde estaban nombres que a posteriori destacarían como BARYSHNIKOV (Gobierno Vasco 1999), VICIMAR (Gobierno Vasco 1998) o JAFAR (Copa de Oro 2000). Ninguno de ellos fue el ganador en aquella ocasión y el hijo de Don Roberto con la chaquetilla del Marqués de Miraflores fue tercero con